Una vez más el gobierno del Partido Popular se muestra insensible e inservible ante el gran problema de la violencia de género.
Se han reunido tres ministros. Tres. La señora Ana Mato y los señores Gallardón y Fernández Díaz. Nada menos que Sanidad (e Igualdad, supuestamente), Justicia (inJusticia, más bien) e Interior (y religión católica podríamos añadir). Pues bien, de esta magnánima reunión han sacado una nada, una NADA bien grande, pero barata, puesto que no han presupuestado ni un maldito euro para las medidas que van a tomar.
¿Qué quieren decir con esto? Lo que nos transmiten es que al PP no le importa un bledo las mujeres asesinadas, ni las que están siendo maltratadas, ni las que están en espera de ayuda, ni nada que tenga que ver con el cáncer del machismo asesino.
¿Qué pretenden con esto? Una foto, desde luego, que es lo que podemos ver en los medios.
Mientras tanto, le niegan al PSOE crear una mesa donde todos los partidos puedan hablar y dar soluciones de manera conjunta. Por lo que el Partido Socialista ha comenzado a reunirse de manera unilateral con sectores de la sociedad que luchan contra la violencia de género como representantes de asociaciones de mujeres, de colegios profesionales de jueces y abogados, sindicatos, de la FEMP, de comunidades autónomas y ayuntamientos.
Elena Valenciano y Puri Causapié (secretaria de igualdad) junto a diputadas y senadoras socialistas han propuesto la dotación de un fondo de emergencia para los ayuntamientos de 100 millones de euros para que puedan atender y asistir a las mujeres víctimas de violencia de género. Han pedido también, en relación con los menores, que se limite el régimen de visitas cuando haya una orden de protección para las mujeres y que exista una ayuda de atención pedagógica para los hijos e hijas de las víctimas mortales.
El deseo de Elena Valenciano y el objetivo que persigue el PSOE con esto es la creación de un gran pacto de estado que haga que las mujeres no se sientan solas y que vean que desde todas las instituciones se va a trabajar para poner freno a la violencia de género.
Para conseguir esto necesitamos que el Partido Popular termine de aceptar una realidad, que Ana Mato se haga feminista y crea en la igualdad, que Gallardón sepa distinguir entre lo que es justo y lo que no y que Fernández Díaz deje de encomendarnos a la virgen María y preste más atención a las mujeres de verdad.
Patricia Gallego Becerra
Secretaria de Igualdad del PSOE-Alh. De la Torre